¿Cómo adaptar la educación tradicional al estudiante moderno?

Con la tecnología como principal aliada, los estudiantes modernos desafían a la escuela y a la universidad tradicional, buscan nuevas maneras de aprender, de potenciar sus habilidades y de satisfacer sus intereses.

Ahora bien, ¿cómo responder ante este panorama desde las instituciones educativas superiores?

La Generación Y, también conocida como millennial y más aún la generación Z o centenial, crecieron al ritmo de los cambios de la globalización. Alfabetizados en un mundo digital, atravesados por la inmediatez y acostumbrados al acceso a la comunicación e información a través de dispositivos tecnológicos, los jóvenes adultos que se encuentran dentro de esta franja etaria generacional son los líderes del futuro.  

Adaptar el currículo, la oferta educativa y las modalidades de enseñanza a la educación online son, en la actualidad, acciones claves para interpelar a la nueva generación de estudiantes e incentivarlos para que se formen en nuestras aulas.  

Un salto hacia la virtualidad 

Cómo llamar la atención de los estudiantes modernos es el principal desafío al que se enfrentan las instituciones educativas hoy y la educación virtual es una de las principales pistas para dar ese salto.  

Incluir en la oferta educativa la posibilidad de aprender a través de entornos virtuales puede convertirse en una de las maneras más efectivas a la hora de ampliar nuestros horizontes y atraer a más estudiantes. Las plataformas de cursos y las opciones de formación gratuita e innovadora, se mostraron, más que nunca durante la pandemia, como una de las mejores aliadas para alcanzar ese objetivo.

Entre las múltiples maneras de aprender gratis que nos brinda la virtualidad se encuentran las "listas de aprendizaje" en Griky, una herramienta que permite al estudiante organizar sus temáticas de interés y, de esa forma, ser el que tome las riendas de su proceso de enseñanza.  

Tal y como sucede con servicios como Netflix y Spotify, cada usuario tiene la potestad de elegir los contenidos de acuerdo a sus inquietudes y gustos particulares e ir armando listas o catálogos de cursos. En otras palabras, pueden personalizar su aprendizaje para hacerlo más efectivo, atractivo y entretenido, sin atarse a un curriculo rígido de la formación tradicional.

Oportunidades a un clic de distancia  

Sabemos que cambiar costumbres y estructuras dentro de las instituciones tradicionales no es una tarea fácil. Sin embargo, frente a las necesidades del mundo del trabajo actual y las formas en que las nuevas generaciones estudiantiles consumen contenido es necesario salir del status-quo y apostar a un cambio de paradigma.  

En América Latina y el Caribe, por ejemplo, casas de estudio de México, Colombia, Cuba, Argentina, Venezuela, Costa Rica, entre otros países, llevan una larga trayectoria en educación a distancia y han comenzado a sumergirse más profundamente en el mundo de la educación virtual. 

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Para 2016, en Colombia se ofrecían 593 programas virtuales de educación superior, situación que, de acuerdo a las estadísticas aportadas por el Ministerio de Educación Nacional, ha mostrado un claro incremento con el paso del tiempo. Y eso se refleja, además, en el número de inscriptos que año a año eligen la virtualidad como modalidad para formarse.  La elección de los estudiantes modernos es clara.

Esto se sustenta en varias razones. Por un lado, las mencionadas características de la generación de estudiantes modernos. Por el otro, las ventajas que ofrece la virtualidad en lo que respecta a autonomía: permite a los alumnos aprender en cualquier momento, en cualquier lugar, adaptarse a su ritmo de vida, su contexto y más. En definitiva, hablamos de una educación personalizada. 

Incluso los gobiernos han decidido apostar por la digitalización brindado dispositivos a estudiantes y profesores, garantizando la conectividad, ofreciendo capacitaciones y contenidos para toda la comunidad educativa y, aunque falta un largo camino en cuanto a infraestructura tecnológica, se está democratizado, más rápido que nunca, el acceso a la educación.

La educación virtual es sinónimo de oportunidades que se encuentra tan solo a un clic de distancia para miles de jóvenes en la actualidad. El desarrollo de las tecnologías digitales aplicadas en la educación son claves en la transformación digital del proceso de aprendizaje.

Llegó el momento de atender las inquietudes de estos estudiantes modernos y dar respuesta a las necesidades e intereses para ellos, que serán los líderes de mañana.  

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