En un escenario global altamente exigente y cambiante, cada vez más empresas se deciden a implementar planes y programas de formación. Potenciar al máximo el talento humano como ventaja competitiva ya no es una opción, es la nueva norma.
La falta de competencias y habilidades es un verdadero obstáculo para el crecimiento empresarial; por lo tanto, la formación de los colaboradores se convierte en una prioridad a la hora de planificar el futuro organizacional. Esta es una de las razones por las que cada vez más escuchamos hablar de la Universidad Digital Corporativa.
¿Qué es y cómo puede ayudar a las empresas a potenciar el crecimiento y el desarrollo de su activo más importante?
Formación corporativa: orígenes de la UDC
Aunque nos parezca que la Universidad Digital Corporativa (UDC) es algo relativamente nuevo, su origen se remonta varias décadas en el tiempo, cuando General Motors comenzó a pensar, por los años cincuenta, cómo gestionar sus recursos humanos para obtener mejores resultados en su producción.
Tal es la historia de las UDCs que algunos estudios sugieren que hoy en día podemos hablar de UDC de primera, segunda y tercera generación. Y no por casualidad esta clasificación va de la mano con las diferentes propuestas de educación que surgieron a través del tiempo.
Ante el actual proceso de transformación digital, la capacitación se hace cada vez más en línea. Y es de esperar que esta tendencia continúe creciendo en un escenario que reserva los encuentros presenciales para aquellas oportunidades que sí o sí requieren presencialidad.
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Fuente: REDALYC |
¿Qué son las Universidades Digitales Corporativas?
Se trata de una modalidad de aprendizaje adoptada por algunas empresas para gestionar el conocimiento interno y el aprendizaje organizacional. El objetivo de una UDC es que la empresa crezca a partir de sumar valor agregado a través del conocimiento bien gestionado y una cultura de aprendizaje permanente.
El modelo de capacitación ideal de una UDC no se debe limitar a simplemente ofrecer un catálogo de cursos, sino establecer un sistema digital de aprendizaje para toda la vida, que apoye a las empresas en su camino a lograr su misión y visión. Por eso, aunque se cree que son las grandes empresas las que necesitan de este tipo de estructuras, la UDC tiene más que ver con la visión de las empresas que con su dimensión.
Las UDCs pueden ser solo virtuales o también pueden combinar modalidades de impartición presencial, eLearning, grupal e individual.
En la actualidad, las universidades corporativas se implementan crecientemente a través de plataformas online LMS (Learning Management System) y LXP(Learning Experience Platform).
¿Qué propuestas despliegan ambas y en qué se diferencian? En el siguiente cuadro, se precisan algunas de sus principales diferencias.
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LXP Learning Experience Platform |
LMS |
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Enfocada al empleado |
Enfocada al administrador |
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Contenidos Variados y diversos (podcasts, playlist de aprendizaje, videos, etc.) Creado por los usuarios y curados por expertos en las temáticas puntuales a través de algoritmos Distribución móvil o escritorio. Espacios de micro-learning. Contenidos fragmentados que se definen en la interacción del usuario con los mismos |
Contenidos Estándar (cursos, itinerarios, etc.) Creado fuera de la plataforma y gestionado por administradores Muy pocas plataformas permiten consumir el contenido desde apps móviles Distribución de contenidos tradicionales. El usuario se inscribe a un curso y accede a una cantidad de contenido definida de antemano |
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Certifican a través de insignias y puntos |
Certificaciones formales, titulaciones |
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Gamificación transversal |
No hay gamificación o es escasa e individual. |
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Experiencia moderna pensada en la generación millennials. Se centra en las acciones que el usuario puede realizar. Pocas acciones, sencillas e intuitivas, para el administrador |
Experiencia tradicional y no centrada en las acciones del usuario y la interacción. Complejas y excesivas acciones para el administrador |
Fuente: LinkedIn - Josman Pérez Expósito
La principal diferencia entre ambas radica en quién pone en marcha la plataforma (usuario o administrador) y en la forma de relacionarse con la plataforma, de modo pasivo o interactivo.
Potenciar el desarrollo y el crecimiento de las personas en las empresas
La transformación tecnológica empresarial depende en buena medida de cómo se incorpore el uso de la tecnología, incluyendo las plataformas de aprendizaje virtual.
La implementación de una UDC, a través de una plataforma de aprendizaje centrada en la experiencia de usuarios es una apuesta al futuro, que aporta una ventaja competitiva. Ayuda a las empresas a descubrir, optimizar y retener el talento humano con el que cuentan. 
Capacitar y retener el talento humano es la clave para el crecimiento empresarial en la era digital tanto en las grandes corporaciones como en las pequeñas start-ups. Por eso las plataformas de aprendizaje pueden aportar a empresas con visión corporativa, innovadora y estratégica, una posibilidad real de crecimiento sostenido.
¿Y cómo hacerlo realidad?
A partir de contar con un campus digital de educación continuada, plataformas como Griky (que cuenta con un catálogo con más de 2000 cursos en habilidades profesionales, habilidades creativas y digitales y habilidades humanas), ayudan a empresas a lanzar, en muy poco tiempo, su universidad corporativa exponencial, para implementar planes y programas de formación digitales que sean personalizados, pero también accesibles y cómodos para las necesidades y preferencias de cada colaborador.
La clave es contar con una propuesta de aprendizaje flow, con contenidos dinámicos, interactivos y lúdicos (como las listas de aprendizaje de contenidos al estilo Spotify), accesibles desde cualquier lugar y en cualquier momento, para que los usuarios decidan cómo y de qué forma organizar sus aprendizajes.
¿Te gustaría aplicar el modelo de Universidad Digital Corporativa en tu empresa?
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