Las universidades necesitan acelerar su proceso de transformación digital. Esta alternativa estaba prevista en la mente de los directivos para darse paulatinamente en los próximos años, pero las circunstancias y el contexto lo pusieron como prioridad absoluta.

Tratar de asegurar el 100% de la oferta académica y con los mismos estándares de excelencia, son el objetivo clave que tienen hoy todas las instituciones de altos estudios de cara a este 2021. Y aunque resulta fácil decirlo, el reto de las universidades radica en asegurarle a sus alumnos tres aspectos de la educación: disponibilidad, calidad e innovación.

Pero, ¿con qué herramientas y experiencias contamos hoy para seguir avanzando en el camino de la calidad educativa?

Todo indica que las universidades están llamadas a replantearse y adoptar un nuevo modelo de aprendizaje permanente y educación online. Pero entre los múltiples retos que deben asumir, podemos precisar los siguientes desafíos que están marcando la enseñanza en todos sus niveles.

Te puede interesar: ¿Cómo brindar una educación personalizada, eficiente y virtual?

Griky Estilos de aprendizaje

 

1. Experiencia personalizada

 

Griky El rol de las universidades en 2021Las dificultades que teníamos en el pasado con la enseñanza personalizada ahora se pueden resolver gracias a la tecnología e Inteligencia Artificial. Estas son capaces de aportar flexibilidad a la forma de aprender y de  organizar los recursos disponibles de acuerdo a las necesidades específicas de cada estudiante. 

La adopción de la enseñanza personalizada mediante plataformas de aprendizaje en línea, también permite obtener información valiosa sobre el comportamiento y la forma en la que los alumnos usan dichas herramientas. Esto, a su vez, redunda en mejoras y cambios que permiten un mayor aprovechamiento de los contenidos, tanto para quien los produce como para quien los consume.

Una versión más poderosa del aprendizaje moderno integra estos tres pilares:

  1. Personalizado y centrado en competencias: el estudiante aprende a su ritmo y se lo promueve una vez alcance los objetivos del tema. El profesor es un coach y facilitador. 

  2. Activo y contextualizado: se trabaja interactivamente, en grupos reales o virtuales, buscando que el estudiante asocie aprendizajes en su día a día. 

  3. Flexible y puertas abiertas: el aprendizaje sucede en muchas partes y existen diversas formas de evaluar el progreso, competencias y/o habilidades de los estudiantes.

 9 de cada 10 estudiantes en 2019 prefieren la formación interactiva, es decir, aquellos vídeos y contenidos con los que pueden relacionarse y que les brindan distintas opciones

Fuente: 2cilindros.com

 

2. Diversidad de los contenidos

Aún hoy en día, muchos jóvenes buscan desempeñarse en las mismas ocupaciones que predominaban hace 20 años (medicina, derecho, entre otras), según un informe publicado en 2020 por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). 

De acuerdo al informe, este fenómeno tiene lugar porque la oferta del mercado académico sigue siendo la misma que en aquel entonces y los bachilleres creen que los únicos escenarios posibles de desarrollo son los programas académicos que ofrecen las universidades y que responden principalmente a carreras tradicionales.

Se vuelve necesario para las Instituciones de Educación Superior desarrollar programas académicos y modelos de formación más acordes al siglo XXI. Por ejemplo, algunas de las tareas que las universidades pueden emprender para subirse a la revolución de la tecnológica educativa incluyen: diversificar la entrega de los contenidos, ampliar las opciones de carreras, ofrecer carreras cortas y apostar a una mayor cantidad de curadores de contenidos para lograrlo, son 

3. El rol del educador, versión siglo XXI

Tener que replantear el rol del docente en esta nueva normalidad es un reto en todo el mundo. Aquel perfil que solo se ocupa de retransmitir contenidos, partiendo de la idea de que el estudiante es una tabula rasa que solo está dispuesto a recibir información en forma unilateral es un modelo hoy en duda. Asume que los estudiantes no cambiaron en décadas y son poco proclives a desarrollar iniciativa propia y,  como consecuencia, tanto su creatividad como el aprender a colaborar con otros, se ven mermados drásticamente.

griky el rol de las universidades en 2021Muy por el contrario, hoy en día se habla del docente facilitador, guía para el estudiante, pero también gestor de una necesaria curación de contenidos que posibilite el aprendizaje real, continuo y efectivo del alumno. En su rol se contempla intrínsecamente que resume, filtra y selecciona información relevante.

El rol de curador va aún más allá: encuentra maneras lógicas de hacer que esa información sea valiosa, mediante conexiones sorprendentes que a otros les llevaría demasiado tiempo o conocimiento que no cuenta y justamente es lo que busca.

Es aquí donde soluciones como las de Griky se destacan por ser un ecosistema integral y completo para la transformación digital educativa: consolida más de 75 carreras universitarias digitalizadas y organizadas en listas de aprendizaje personalizados, que pasan por una constante revisión de curadores, en aras de ofrecer un producto útil, pertinente, renovado y de calidad.

Es importante entender la dimensión de lo que significa una verdadera transformación de la educación digital: las universidades online no sólo necesitan tecnologías y plataformas. Los contenidos de calidad digitalizados y permanentemente actualizados por curadores expertos en el tema es lo que buscan los profesionales del futuro.

separador-griky

Conoce cursos de calidad, actualizados y curados por expertos.

Conocer los cursos online